viernes, 14 de diciembre de 2012

EL EROTISMO



Es una forma de sentir, expresar, vivir y compartir el amor, la pasión y la ternura y así manifestar y experimentar la dimensión sexual, para una vida plena.
Es un potencial humano, un arte, dirigido al cultivo del amor y que se nutre de los otros componentes de la personalidad para crear escenarios donde el amor y la sexualidad lleven al máximo disfrute.

Precisa de la motivación, fuerza que inicia la búsqueda de información (una importante fuente de aprendizaje son los vídeos, películas y lecturas) y la imaginación y mediante la picardía, la insinuación y otras sutilezas, se componen situaciones creadas con sensualidad para estimular el amor, la sexualidad, la atracción. 

En el erotismo, todo el ser en su conjunto está implicado, con el cuerpo y la mente (principal órgano sexual), con el poder de la intención y expresándolo mediante la comunicación verbal y no verbal. 

Este potencial humano disminuye y se bloquea con enfermedades médicas y otras psicopatologías como la depresión, ansiedad, estrés etc., la vena erótica desaparece, también ocurre por la ingesta de fármacos u otras drogas legales e ilegales. 

También en las parejas puede crearse un importante deterioro de esta función, cuando hay conflictos y discusiones pues los deseos de intimidad para compartir placer con el otro se bloquean. 

En cambio, sí contribuyen a obtener los mejores resultados, los factores de personalidad relacionados con el positivismo, la practicidad, el buen humor, la inteligencia y la creatividad ya que juegan un papel central en la manifestación y la vivencia del amor de pareja y en el cultivo de esos momentos especiales de excitación, fantasía y sexo. 

En general conviene considerarlo como algo muy importante (junto a otros aspectos de la vida de las personas) y cultivarlo con frecuencia, ya que es la vía más segura para que la pareja se sienta querida y el amor perdure. 

En este arte del erotismo, en función de las habilidades de los participantes, intervienen la imaginación y la experiencia y todos los sentidos, olfato, gusto, tacto, vista, oído, y otros componentes del ser: el movimiento, la comunicación no verbal, los silencios y las palabras. 

Siempre conviene observar primero al "otro" para adecuar el contexto erótico y así crear el conjunto.

Imprescindible variar para conseguir estimular, lo mismo siempre, aburre. 

Hay personas que obtendrán una mayor estimulación creando un ambiente sadomasoquista y otras con algo más romántico con velas, perfumes y alimentos. 

Los juguetes eróticos contribuyen y tienen su protagonismo. A la vez conviene tener en cuenta además, que los atuendos en según qué casos, determinan. 

Las prendas íntimas sexys a veces tienen el poder de transformar a la persona que las usa, en alguien que se siente más dentro de la dinámica sensual y sexual ayudando de forma gráfica y componiendo una materialización de lo más apasionante del amor, llevando a los participantes a exteriorizarlo y así a participar en el baile de la manifestación de su potencial erótico, en conjunto con todo lo demás y regalando a la pareja también esos momentos tan especiales.

El movimiento, las caricias y el masaje a su vez, son elementos contundentes, llegando a ser arrebatadores y sin olvidar el lenguaje, arma poderosa que permite al ser humano expresar y compartir todas las emociones y sentimientos que se generan durante la vivencia amorosa al intimar con la otra persona. 

Este potencial mental, artístico y sensorial que poseen los humanos goza de las mismas características de desarrollo y crecimiento que otros componentes del ser: cuanto más se practica más se domina, se amplía y mejores resultados se obtienen (Lamarck, 1809). 

Los que han desarrollado este potencial y estas habilidades, disponen de un maravilloso regalo y pueden estar seguros de poseer las estrategias que les transportan a ellos y sus parejas, a disfrutar de las claves del placer y del éxtasis.